“¡Somos Bayern! ¡Somos Múnich! ¡Vamos, rojos!”. Los cánticos de jugadores y aficionados resonaban en el Allianz Arena después de lograr una victoria por 3-1 sobre el Schalke 04. Fue una tarde de fútbol emocionante. “Hemos dado un paso adelante”, se congratuló Robert Lewandowski. Unas horas antes la coyuntura era otra muy distinta. Cuando Niko Kovac y sus hombres llegaron al…
